Creo que si tuviera que dibujar el Olimpo, lo imaginaría exactamente como la Acrópolis.Durante el día, despunta blanca y diáfana entre las miles de construcciones rectangulares, casi insípidas, de la moderna ciudad. Sólo dos templos se distinguen entre las ruinas; el Partenón y el Ereteo, pero es precisamente ese carácter desgastado y quebradizo lo que...